Patronato de la Escuela de Música Julián Romano, Participación, imposición, información.

Precios públicos
 Patronato de la Escuela de Música Julián Romano
Participación, imposición, información

Cuando se detecta un problema y se buscan soluciones, participación, se define y es, cuando entre todos, padres, profesores, alumnos, Ayuntamiento y merindanos, se buscan distintas soluciones entre aquellas que sean posibles y mejores para todos.

Imposición, es lo que ha pasado, se detecta un problema y se aplica una solución unilateral, no modificable, salvo detalles que no cuentan para una solución alternativa.  El 22 de Marzo, Patronato y presentación de las tasas con el 25% de becas para los alumnos empadronados en Estella-Lizarra, el 7 de Abril aprobación en el Pleno de la medicación presupuestaria para el pago de las becas (si no se aplicaba la ordenanza no hacía falta modificación presupuestaria), como se ve con todo decidido, el 22 de abril  nuevo Patronato donde se comunica la misma solución razonada pero sin participación, y con esta estrategia de imposición por razón de su mayoría en  el Ayuntamiento, nunca será admitida por los que son parte de la solución y lo son, porque tendrán que suplir los ingresos que el Gobierno de Navarra, ha dejado en ayuda de la educación musical.

La escuela Julián Romano, fue una iniciativa del Ayuntamiento de Estella-Lizarra de los aficionados y profesionales de la música, de las personas que querían su difusión, que apostaron por la enseñanza de la música tradicional y del conocimiento para preparar posibles músicos profesionales.

Ha pasado por distintos espacios o ubicaciones, Colegio comarcal, edificio de la Estación y por último en el Espacio de Ocio y Cultura de los Llanos, en fin en San Benito.

Lo de San Benito, parece premonitorio, aquello que se decía menudo, San Benito nos ha caído. Primero, Escuela de música, Escuela de Música elemental, Conservatorio elemental en los mejores momentos y vuelta a Escuela, por criterios políticos y restricciones económicas.

El deseo de la creación de escuelas de música por otras localidades, y el recorte en las partidas económicas, por parte del Gobierno de Navarra, repartiendo menos dinero entre más, ha conllevado en el tiempo problemas de reparto y de oferta.

El acuerdo establecido entre administraciones de a tres partes, se ha roto, por la parte entendemos del más fuerte, el Gobierno de Navarra,  apostando por otros parámetros y necesidades, y entendiendo la música como no necesaria y espacio de ocio, no estudiando la posibilidad de que esta asignatura se diera en la escuela y optando por el bachillerato musical o artístico.

Algunas administraciones han seguido apostando por la oferta, entendida como educación y en las escuelas, pero esto quizás no llegue nunca, es bueno que las Administraciones y Ayuntamientos, apuesten por cubrir esta necesidad, y en este caso el Ayuntamiento Estella-Lizarra se ha comprometido y asumido los gastos, por los ingresos que debería recibir del Gobierno de Navarra.

Por causa de un seguimiento inadecuado, no haciendo todos los esfuerzos posibles para solucionar problemas económicos, y una negligencia en el funcionamiento del Patronato de música, por el Ayuntamiento, por razón de su oferta, por razón de sus presupuestos, en cualquier caso aprobados por el Ayuntamiento, nos ha  llevado a la actual situación.

Advertidos por los servicios administrativos propios y de la cámara de Comptos, de la necesidad de solucionar este problema, el Equipo de gobierno, hace un estudio económico y decide aplicar una tasa nueva, de precios públicos.

La solución parecería razonable si el Ayuntamiento hubiera realizado seguimiento en todas sus fases, parecería correcto si el Ayuntamiento aún conociendo esto, hubiera apostado por la música asumiendo el gasto, no por pereza en la gestión, si no por apuesta por la música y la Escuela Julián Romano.

Pero de las reuniones en las que hemos participado, han quedado claras algunas cosas:

1º El no funcionamiento del Patronato durante un largo tiempo por lo menos 8 años.

2º El Ayuntamiento ha venido sin cuestionar, diría, sin mirar, ni interesarse por los presupuestos, ni por el plan pedagógico, ni por los contratos necesarios para la atención a la oferta de plan pedagógico.

3º En esta legislatura, y a pesar de las advertencias de la administración y conociendo los ingresos que recibirían del gobierno de Navarra, aprobamos el plan pedagógico vigente, la oferta educativa y los presupuestos.

4º Ahora y a pesar del conocimiento de lo que el Gobierno ingresaría al Ayuntamiento, el grupo de Gobierno del Ayuntamiento no negocia ayudas  con el Gobierno de Navarra que atienda a las ayudas antes mencionadas, con el cuatripartito de su misma línea y a pesar de que el problema es viejo, el grupo de UPN y con gobierno de igual línea,  no solicitó las ayudas necesarias.

Los precios públicos desde nuestro punto de vista sólo tiene una intención, recaudar la partida que el Gobierno de Navarra no proporciona de subvención,  cargándoselo a los alumnos.

En  el pleno de aprobación de las tasas quedaron algunas cosas claras, no existió participación, bandera que esgrime como un castigo el grupo de Gobierno que raramente cumple, hubo una imposición y muchas informaciones, a los padres, alumnos, profesores, Ayuntamientos y al resto de  los concejales, primero difíciles de comprender y que fuimos entendiendo en el tiempo y que significaron un castigo para los alumnos.

No sé si fue estrategia, por parte de los grupos que entraron a gresca, para aclarar que la culpa la tenía los unos o los otros, discusión que derivó, en quien había gestionado  o gestionaba  peor actualmente, en ese debate que es repetitivo y aburrido, perdimos un tiempo precioso, recordando plenos sin contenido, recordando gestiones mal realizadas, gestionando ayudas que nunca llegaron y ahora los que no las recibieron reclaman a los que no la reciben, la misma negligencia.

Muchas de las personas que acudieron al pleno se divertían, pero las más estupefactas, esperaron a que alguien pusiera cordura para seguir con el tema de tasas y la música, con este debate encima de la mesa, además del tiempo, se había cortado el debate y se había perdido para muchos, cualquier esperanza de que algo pudiera cambiar.

Solo pedían tiempo para buscar otras soluciones pero ya había pasado el tiempo, los ánimos de batallita habían acalorado las razones, pudiera haber otras soluciones pero no se quisieron explorar, por que de ser la única manera de arreglarlo, yo no lo creo, el equipo de Gobierno no quiso contemplarlas.

Llevamos algunos plenos en los que sólo las mociones y la batalla verbal hace que sepamos que estamos en el Pleno, y es cierto que en los días que ha habido temas de importancia, la discusión de quien lo hizo peor y lo hace peor antes en gobierno y ahora en oposición o antes en oposición y ahora en gobierno,  viene a completar la información de los plenos.

Parece que Estella-Lizarra no tuviera problemas y capacidad de solucionarlos y servir a los ciudadanos y que todo lo que se hace es ruido de artificio.

Las razones últimas del equipo de Gobierno, que sigue apostando por la Escuela de Música Julián Romano, es que de no racionalizarse el gasto el Ayuntamiento veía difícil el mantenimiento de la actividad de la Escuela, quizás este cambio de tasas sea el principio del fin de la misma.

Todas las cosas, con voluntad, se pueden modificar,
se pueden solucionar, todavía puede haber tiempo.