Desde el punto de vista local de nuestra ciudad, no llegamos a comprender que un alcalde pida civismo y sensibilidad en el cuidado de los espacios públicos, en cuanto a limpieza, no colocación de carteles, y sin embargo sea ese mismo grupo de Alcaldía quienes utilizan esos mismos espacios con un fin político.
Son unos hechos incoherentes, pedir y acusar a los ciudadanos del estado de la ciudad, además de amenazar con multas, y mientras ellos, su grupo EH Bildu, son quienes aplican una doble vara de medir.